Tiempo en familia vs tiempo en pareja
Cuando tienes hijos, tu vida gira, literalmente, en torno a ellos. Sus horarios, sus comidas, sus deberes, hasta sus actividades extracurriculares. Pero, ¿qué pasa con el tiempo que solías compartir con tu pareja? Obviamente, lograr el balance entre ambos no es fácil, pero sí es posible. Por eso, hoy te voy a compartir 6 consejos reales para que tengas un balance entre ambos.
1. No todo el tiempo familiar es tiempo de calidad
Estar todos juntos en casa no siempre significa que están conectando. A veces están cada uno en su mundo: los niños con sus juegos, tú con tu celular, tu pareja en otra habitación. Por eso, dedica momentos específicos para actividades que involucren a todos. Cocinar una pizza, ver una peli, salir al parque. Que no sea solo “estar”, sino “compartir”. Así le das valor al tiempo en familia.
2. Ten una cita al mes (mínimo) con tu pareja
Con la agenda llena suena difícil, pero si no lo agendas, no va a pasar. Una salida si es que alguien puede quedarse con los niños, una cena en casa cuando los niños duermen, o una simple charla sin interrupciones. Reconectarse como pareja fortalece todo el ecosistema familiar. Así que jamás lo subestimes.
Yo lo hago semanalmente, le dedico un día de la semana a tener un date con mi esposo pero debo confesar que a veces es muy complicado lograrlo. Pero la importancia de tener estos momentos a solas es invaluable para fortalecer la relación de pareja.
3. Tiempo en pareja no es egoísmo, ni descuido.
Muchos papás y mamás sienten culpa por querer pasar un tiempo a solas con su pareja. Pero una relación sana entre ustedes se refleja directamente en el ambiente del hogar. Cuando están bien como pareja, están mejor como mamá y papá. Es más, se define el verdadero teamwork porque si ustedes tienen buena comunicación, respeto y conexión emocional entre la pareja, es más fácil tomar decisiones juntos, manejar el estrés diario y enfrentar los retos de la crianza.
4. Incluye a tu pareja en las rutinas familiares
Muchas veces, sin darnos cuenta, uno de los dos (normalmente la mamá) termina encargándose sola de la mayoría de tareas del día a día con los hijos: bañar a los niños, preparar sus comidas, ayudar con los deberes, organizar la mochila, etc.
Eso puede hacer que las rutinas se sientan como una lista de pendientes interminable y agotadora. Si involucras a tu pareja, puedes convertirlos en momentos para compartir entre ustedes.
En mi caso, tengo dos hijos y cada uno practica un deporte diferente. Así que tratamos de involucrarnos ambos y organizarnos. Nos ha tocado dividirnos los fines de semana las actividades, Brian se va con Martin a sus torneos de fútbol y yo me voy con Oli a sus competencias de gimnasia y así ambos estamos involucrados.
5. Enseña a tus hijos que mamá y papá también se quieren
Está bien que tus hijos sepan que ustedes también necesitan tiempo juntos. Eso les enseña sobre amor, respeto y vínculos sanos. No se trata de esconder los dates, sino de mostrarles que el cariño no desaparece cuando llegan los hijos y que el tiempo de calidad entre ustedes es invaluable.
La mejor forma es diciéndoles a dónde van a ir mamá y papá, para que ellos crezcan valorando la importancia de alimentar una relación.
6. Sé flexible, no perfecta
No todos los días van a estar perfectamente equilibrados. A veces, la familia va a necesitar toda tu atención. Otras, vas a necesitar enfocarte solo en tu pareja. Y habrá días en los que simplemente necesites un respiro para ti. Eso no es un error, es normal. Lo importante es que, con el tiempo, encuentres espacio para todo: familia, pareja y tú. Que ninguna parte se quede olvidada.
Encontrar el equilibrio entre ser familia y ser pareja no es cuestión de dividir el tiempo en partes iguales, sino de que cada parte cuente. Porque si la pareja está bien, toda la familia lo estará también.
¡Intercambiemos consejos! ¿Qué consejo me darías para balancear el tiempo en familia y de pareja?